Amable convivencia y consumo colaborativo: Nuestro Fin de Año
Usando transporte público o trayectos compartidos en coche, realizamos un encuentro en un espacio lúdico de una comunidad vecinal que amablemente nos ha cedido su uso. Así, como en una entrañable cadena para compartir bienes de manera gratuita, la comunidad que constituímos ha podido celebrar el Fin de Año, conectada por espacios, valores compartidos, conocimientos y recursos. La economía colaborativa ha dotado nuestro catering de una variedad y calidad exquisita.
¡¡Unas cuantas horas felices en que no hemos sido consumidoras, hemos sido comunidad que comparte recursos físicos, culturales, afectivos, recuerdos y planes de futuro!!
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