Las revoluciones, se hacen en la calle
Texto: Heidi Sánchez (@MetralletaHeidi)
Fotografía: Mario Valverde (@mariovalverdeCM)
Quiénes se dicen de izquierdas no deben ser esos supuestos líderes que centralizan las luchas por derechos básicos de miles de ciudadanos, ni aquellos que afirman que por el Twitter se hace laRevolución. Y mucho menos esos que quieren protagonizar antes que actuar.
No es sano para esta batalla contra las entidades financieras encontrar personas que aseguran que por un TT ( tema del momento en Twitter) se ha conseguido parar un desahucio, un desalojo o un derribo.Los desahucios se paran en la calle, se han paralizado por las negociaciones que realizan los abogados con las comisiones judiciales, mostrando nuestro enfado con un sistema capaz de dejar a personas sin techo, en otras palabras, moviendo el cuerpo del sofá, el inmovilismo es una de nuestras mayores auto-derrotas.
No niego que el twitter, como herramienta de difusión sea muy útil, mantengo la convicción de que es un medio y no un fin.
Igualmente las campañas difamatorias, el maltrato verbal y público en la redes, en los corrillos nos desentiende de nuestra verdadera labor, la de luchar. Si le hacemos el juego al enemigo estamos perdidos. No demos ese ejemplo.
Mientras existan personas que pierden su casa diariamente, muchas de las que ni siquiera nos enteramos, no podemos pretender centralizar una lucha que afecta a cientos de miles de ciudadanos ¡tenemos que aunar fuerzas! Nuestro enemigo no somos nosotros mismos.
Cómo podemos cambiar esto. Preguntarnos, ¿estoy siendo intachable en mis actuaciones?. En un día no podemos cambiarlo todo, pero si podemos cambiar alguna cosa de a poco…La lucha por la viviendanos señala un camino, un camino de acciones civiles con el pueblo activo.
Tenemos que ser audaces aunque existan desafíos, dejar a un lado nuestras propias batallas para dar paso a las que son realmente importantes, defender los derechos básicos, esos que nos roba la dictadura financiera, la especulación y el sistema capitalista, devorando incluso nuestra dignidad. Todos juntos y juntas podemos lograrlo, llegar a la meta imaginada.
Cuando una lucha es justa, digna, los que la hacen no esperan recibir méritos sino logros!
Periodismo Digno
