Celebración de la VII semana de la lucha campesina y la soberanía alimentaria
Yayoflautas de Madrid queremos reivindicar como todos los colectivos que la han hecho possible, esta celebración por la lucha campesina, la soberanía alimentaria y un Madrid respirable.
Hemos dado difusión hace unos días en http://yayoflautasmadrid.org/taller-cultiva-tu-espirulina/ de la celebración los días 8, 9 y 10 de mayo de un taller de cultivo de espirulina con el que aportar información y difusión a la lucha por una ciudad limpia y viva en la que sea posible la producción agroecológica artesanal.
Por problemas de agenda de las personas que impartirán el taller, no ha sido possible sincronizarlo con esta semana de lucha, pero queremos ofrecer aquí las razones de porqué este taller está tan relacionado con dicha lucha y con todas las luchas de los movimientos sociales.
Hoy en día, en plena crisis y expolio de derechos y libertados, quien más y quien menos se ha organizado con otras personas para buscar alternativas hacia una sociedad más justa, solidaria y respetuosa con el medio ambiente.
La llamada a la organización colectiva, lo es también a generar otra economía de bienes comunes y otro consumo, a conseguir el rescate por la ciudadanía de la capacidad de gestión de los recursos, la alimentación como un derecho con el que no se puede comerciar, el cuidado del medio ambiente que la espirulina efectua porque convierte co2 en oxigeno, porque necesita muchísima menos agua que otros cultivos
Y es que hay quien trabaja la contrainformación porque nos han robado los cauces de participación social y política y urge despertar el pensamiento crítico de la gente.
Hay quien trabaja la denuncia de injusticias y corrupción.
Hay quien trabaja las alternativas electorales y políticas.
Hay quien trabaja una gestión económica alternativa, unas formas colectivas de trabajo y toma de decisiones. El rescate de la autogestión de los recursos como forma de encontrar un buen vivir que nos aleje de ser obreros exclavos.
Posiblemente todas las opciones estén siendo trabajadas por todas las personas activistas, de una u otra manera.
Impartirán el taller miembros de la Red Internacional de Cultivadores de Espirulina por la Soberanía Alimentaria ,en su declaración de principios resalta el tener como objetivo la divulgación del cultivo de Espirulina a pequeña escala y de forma artesanal para poder disponer de una alimentación sana, saludable, autosuficiente y respetuosa con el entorno. Reivindicando así, la alimentación como un derecho y no como un bien de mercado, y proponiendo su distribución de forma gratuita como forma de inicio en su cultivo y creación de vínculos de intercambios bidireccionales a modo de red. Fue creada en Cataluña en 2010. (Ver: http://xarxaespirulina.wordpress.com)
Hemos programado este taller pensando en el fortalecimiento de redes alejadas de instituciones gubernamentales e internacionales que sean una opción de intercambio de saberes y experiencias y que supongan una opción real en pro de la soberanía alimentaria, soberanía energética, de cuidados y de todos los trabajos fundamentales para reservar la vida.
La espirulina es interesante por ser alimento natural, de fácil producción, nulo impacto ambiental gran riqueza nutricional y que puede producirse a bajísimo coste.
La espirulina ha contribuido, y contribuye, junto con otros microorganismos, al hacer posible la vida con este planeta gracias a la enorme captación de CO2 que ella transforma con oxígeno. Gracias a sus propiedades nutricionales también ha contribuido, y contribuye, al facilitar una dieta sana y equilibrada, siendo conscientes de que la espirulina es prescindible para tal.
Consideramos que la espirulina forma parte de los bienes comunes de la humanidad, como el aire, la tierra, el agua, etc., Que no pueden entrar dentro de la política del comercio. Es por ello que la espirulina debe ser distribuida de forma gratuita a todos los que así lo desee para poder cultivar.
Podríamos haber programado un taller sobre huertos en balcones, de comida que pisamos y deberíamos recolectar como la ortiga, una planta algo vilipendiada de la que no se valoran sus grandes propiedades….de la verdolaga…que es también comida que pisamos o de agroecología y economia social solidaria.
Pero la espirulina auna una mayor carga simbólica sobre los bienes comunes, el rescate por la ciudadanía de la capacidad de gestión de los recursos, la alimentación como un derecho con el que no se puede comerciar, el cuidado del medio ambiente que la espirulina efectua porque convierte co2 en oxigeno, porque necesita muchísima menos agua que otros cultivos, porque un colectivo imaginado por Belen Gopegui muy poco antes de que aparecieran las asambleas de tomalaplaza y en los barrios, cuidaban entre todos un estanque con estas microalgas
Nos apenamos cuando vemos a nuestros jóvenes licenciados integrados en multinacionales que lo supeditan todo a la obtención del máximo beneficio, al personal empleado en cadenas de comida basura, en conglomerados energéticos que atentan contra el medio ambiente, …¿Cuáles son las consecuencias que se derivan de nuestro trabajo para las empresas que nos emplean?¿Nos gusta la sociedad en que vivimos? ¿Es posible modificarla, mejorarla?… intuímos el malestar de los jóvenes, de los trabajadores, en general.
Con este taller hacemos nuestra la lucha por recuperar la capacidad de decidir sobre lo que es bueno investigar, elaborar y transformar; la necesidad de proteger a los sujetos más frágiles; la resistencia a que sean unos pocos los que decidan y se apropien del trabajo de la mayoría.
Hay que hacer cosas, producir aunque sea pequeñas cosas, caminar contra la resignación, contra esa visión tan extendida que postula la inevitabilidad del sistema socioeconómico en el que vivimos y la ausencia de alternativas. ¿Cuántas veces nos lamentamos de lo mal que están las cosas pero las aceptamos, nos inhibimos, sea porque pensamos que su solución no nos compete, porque para eso ya pagamos y soportamos a los políticos que elegimos, o porque ésta se halla más allá de cualquier capacidad de actuación a nuestro alcance?
La llamada a la organización colectiva, lo es también a generar otra economía y otro consumo.