La voz del pueblo no es ilegal
Miles de personas claman ante el Congreso:»La voz del pueblo no es ilegal». El operativo policial movilizado para la ocasión por la Delegación de Gobierno de Madrid alcanzaba 25 grupos de la Unidad de Intervención Policial (UIP), lo que supone un total de 1.250 antidisturbios.
Tras una pacífica concentración en Neptuno, coreando gritos contra la conocida como ‘Ley Anti Protesta’ , en torno a las 20 horas, integrantes de la Coordinadora 25S, mediante un megáfono, han indicado que se iba a “cumplir la promesa de rodear el Congreso”, y han llamado a los congregados a marchar hacia Cibeles para bordear la manzana en la que se encuentra el edificio. Miles de personas se han dirigido entonces hacia esta plaza, quedando Neptuno prácticamente vacía, para más tarde continuar por la calle Alcalá, la Puerta del Sol y las calles Carretas y Atocha. Sin embargo, ha sido en esta última vía donde han comenzado los encontronazos entre Policía y manifestantes. Varias decenas de efectivos de la UIP han tratado de cortar el paso de la comitiva, lo que ha provocado protestas por parte de los manifestantes. Al no poder avanzar, algunos de ellos han lanzado objetos contra el grupo de antidisturbios, lo que en un principio ha provocado que retrocedieran. Sin embargo, la llegada de nuevos agentes y las primeras cargas, con disparos de balas goma incluidas, han dispersado al grupo, que en su mayoría se ha dirigido de nuevo a la Puerta del Sol.
Tras la primera carga policial se han vivido numerosos momentos de caos en el centro de la ciudad. Mientras contenedores ardían en la calle Doctor Cortezo, junto a la plaza de Tirso de Molina el grueso de la manifestación cruzaba Sol y se dirigía a la Gran Vía, donde de nuevo la Policía ha cargado, dispersando a la comitiva. Desde entonces se han producido escaramuzas, retenciones y barricadas en numeroso puntos de la almendra central de la ciudad. Entre los incidentes registrados, una oficina de Bankia ha sido asaltada en la calle Duque de Alba.
Las cargas dejan 23 heridos tras la protesta contra la Ley Mordaza
Jaime Alekos-Periodismo Digno, ha recogido los disturbios en el siguiente vídeo:
http://periodismohumano.com/en-conflicto/disturbios-tras-la-manifestacion-contra-la-ley-mordaza.html
Recordamos las reflexiones de @conchacaballer que en El País, describe 10 cosas prohibidas por la nueva Ley Mordaza:
«Contra el 15-M: ya no se podrá volver a acampar en Sol ni en ningún espacio público.
No se podrá acompañar a las víctimas de los desahucios porque supone obstaculizar la labor de funcionarios públicos.
No se podrán celebrar manifestaciones en torno al Congreso de los Diputados, el Senado, ni el Parlamento de Andalucía. No importa que desde hace 30 años se esté haciendo a diario y sin conflictos. Vaya a manifestarse donde no estén sus representantes.
No se podrán grabar las actuaciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad ni compartirlas en las redes sociales. Si hay violencia policial, debe quedar en la estricta intimidad.
No podrá colgar pancartas ni banderas en edificios.
No podrá instalar tenderetes para recoger firmas o repartir propaganda.
Tenga cuidado de que sus expresiones no supongan una ofensa para España a juicio de la autoridad competente. Diga que recitaba a Cernuda, Machado o Gil de Biedma por si acaso.
No haga reuniones o manifestaciones en lugares de tránsito público. Busque lugares recónditos de tránsito privado.
No pierda el DNI ni dejen que se lo sustraigan tres veces en cinco años porque será multado. Llévelo siempre atado al cuello.
No pronuncie injurias, calumnias ni acusaciones contra las autoridades o instituciones en las manifestaciones públicas. No vuelva a repetir aquello de “Fulanito… trabaja de peón”. Ahora debe decir “Mariano, creo que te estás equivocando”.
El Gobierno creará un registro de infractores que tendrá unos indeterminados efectos administrativos. Quizá no le den licencia de apertura de su negocio, o le prohíban el acceso a cualquier servicio público.
El Gobierno se reserva el derecho a autorizar, disolver y reprimir un derecho fundamental. Para que los jueces no se entrometan han trasladado las decisiones a la vía gubernativa. Bastará la palabra de un funcionario, un policía o una autoridad para ser multado. Si aún así se empeña, las tasas judiciales le convencerán de que está mejor calladito.
Con o contra esta ley, no se trata de un debate entre izquierda y derecha sino entre estado autoritario o democrático. Una vez más. Treinta y tantos años después».
Y nosotros añadimos: Veremos policía privada de empresarios para frenar a los trabajadores en las huelgas generales.