Trueque hortelano
Un proyecto en web pone en contacto a candidatos a agricultores ecológicos con ganas de cultivar con propietarios de terrenos que no están siendo productivos para compartir la cosecha
Tierra sin huerto y huertos sin hortelanos. Una dinámica que ha dejado fincas y suelos -a veces bien feraces- baldíos y olvidados. La vorágine urbanita y su estilo de vida a toda carrera ha convertido muchos paisajes en meros solares. Ciudadanos de las urbes han ido arrinconando casi cualquier relación con la naturaleza y han dejado las visitas a los supermercados como la vinculación más cercana a los orígenes de lo que se come.
Los huertos urbanos son una tendencia que realmente se ha puesto de moda. Ya sea en un espacio común habilitado para el solaz y la búsqueda de ocio como la versión de terraza. Cientos de tutoriales enseñan a cultivar tomates en una maceta al lado de la ventana o desarrollar plantaciones verticales en la pared del balcón en el centro de una ciudad. Huertos Compartidos es un paso más allá.
La idea de Santiago Cuerda nació a finales de 2011. «El primer lanzamiento fue para las fiestas navideñas», cuenta el coordinador del proyecto. El emprendimiento trata de poner en contacto a propietarios de suelo que no pueden aprovecharlo con candidatos a hortelano que no poseen terreno pero sí ganas de cultivarlo. El portal de Huertos Compartidos los relaciona para luego compartir la producción. El programa se ha extendido a siete provincias: Barcelona, Murcia, Madrid, Valencia, Toledo, Cuenca y Sevilla. «En un principio hemos arrancado con la financiación de la Asociación Reforesta y la mía como emprendedor», relata Cuerda.
Ampliar información en : http://www.huertoscompartidos.com/