Suscribimos la carta de nuestros compañeros portugueses a Merkel
CARTA ABIERTA A ANGELA MERKEL
Estimada canciller Merkel:
Antes de nada, nos gustaría aclarar que nos dirigimos a usted como la canciller de la República Federal de Alemania. No le hemos votado y no reconocemos que haya una canciller de Europa. En este sentido nosotras, las personas que suscribimos esta carta abierta, lo hacemos como ciudadanas y ciudadanos de un país que usted pretende visitar el próximo día 12 de Noviembre. Por carácter de la visita anunciada y frente a la grave situación económica y social vivida en Portugal, afirmamos que usted no es bienvenida. La señora canciller debe ser considerada persona non grata en territorio portugués, porque viene, claramente para interferir en las decisiones del Estado Portugués sin haber sido encomendada democráticamente por los portugueses.
Incluso así, como nuestro gobierno hace algún tiempo que dejó de obedecer las leyes de este país y la Constitución de la República, le dirigimos esta carta directamente a usted. La presencia de varios grandes empresarios es un ultraje. Disfrazados de “inversión extranjera”usted traerá una serie de personas que vienen a ver las ruinas en que su política ha dejado nuestra economía, como hizo con la griega, la irlandesa, la italiana y la española. Su comitiva no solamente junta a quien coaccionó el Estado Portugués, con el consentimiento del gobierno, a privatizar el patrimonio y los bienes mas preciados, como también junta potenciales beneficiarios de este patrimonio y de bienes públicos, comprándolos hoy a precio de rebajas.
Esta carta no puede ni debe ser vista como una reivindicación de carácter nacionalista o chauvinista, se dirige a usted, como promotora máxima de la doctrina neoliberal que está arruinando Europa. No pedimos explicaciones al pueblo alemán, que tiene toda la legitimidad de elegir a sus representantes. Sin embargo, en este país donde vivimos, su nombre nunca estuvo en ninguna urna. No la elegimos y por tanto no le reconocemos el derecho de representarnos y meno aun de tomar decisiones políticas en nuestro nombre.
Y no estamos solos ni solas. El próximo día 14 de Noviembre, dos días después de su anunciada visita a nuestro país nos levantaremos con otros pueblos hermanos en huelga general que incluye muchos países europeos. Será una huelga contra los gobiernos que traicionaron y traicionan la confianza depositada por las ciudadanas y ciudadanos, una huelga contra la austeridad a la que nos han conducido. Pero no se haga ilusiones señora canciller. También será una huelga contra la austeridad impuesta por la troika y por todos aquellos que la pretenden transformar en un régimen autoritario. Será por lo tanto una huelga también contra usted. Y si aplaudimos a nuestros pueblos hermanos del Estado Español, Griego, Italiano, de Chipre y Malta, aplaudimos también al pueblo alemán que sufre con nosotros. Sabemos que el Wirtschaftswunder, el “milagro económico” alemán, se construyó a base de perdones sucesivos de la deuda alemana por parte de sus principales acreedores. Sabemos que la supuesta fuerza económica alemana actual fue construida a base de una brutal represión salarial que dura más de diez años y de crear trabajo precario, temporal, mal pagado, que inquieta a buena parte del pueblo alemán. Esto nos muestra también, cual es la perspectiva que usted tiene para Alemania.
Es lógico que no nos responda. Es probable que el gobierno portugués, débil y servil la reciba entre flores y aplausos. Pero la verdad señora canciller, es que la mayoría de la población portuguesa no aprueba de ninguna manera la forma como este gobierno, sostenido por la troika y por usted, esta destruyendo el país. Aunque escoja un recorrido secreto y un aeropuerto privado, para no tener que enfrentarse a manifestaciones y protestas contra su visita, sepa que estas serán por todo el país, contra usted misma y lo que representa. Su comitiva podrá intentar ignorarnos. La Comisión Europea, el Fondo Monetario y el Banco Central Europeo también lo intentarán. Pero somos cada vez más, señora Merkel, aquí y en todos los países. Nuestras manifestaciones y protestas tendrán cada vez mas fuerza. Cada vez conocemos mejor la realidad. Las historias que nos contaban nunca cuadraban y ahora sabemos que son mentiras descaradas.
Hemos despertado, señora Merkel. Malvenida a Portugal.