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Palestina Libre

Una vez más dedicamos nuestro Lunes en Sol a defender al pueblo palestino. Es una buena noticia que callen las armas, pero eso no nos debe hacer olvidar todo el horror vivido y sufrido, para que nunca más vuelva a pasar. No podemos olvidar a las miles de familias que han quedado sin casa ni medios de subsistencia. No podemos olvidar los miles de madres y padres a los que han asesinado a sus hijos e hijas, ni a los miles de niñas y niños que han quedado huérfanos o gravemente mutilados, con secuelas físicas y psíquicas de por vida. El Genocidio en Palestina pasará a la historia como uno de los episodios más crueles e inhumanos nunca vistos, por su ejecución cruel y despiadada, utilizando todas las tecnologías a su alcance al servicio de la destrucción y la muerte. Burlándose de las más elementales normas internacionales Israel ha destruido escuelas y universidades, mezquitas, iglesias, hospitales y todo tipo de infraestructuras eléctricas y de comunicación, depósitos de agua, de alimentos,…Ha atacado indiscriminadamente a la población civil, sin ningún tipo de arrepentimiento, incluso mostrándose la soldadesca orgullosa de las atrocidades que cometía.

Callarán las armas, pero no nos engañemos, no ha llegado la paz, una paz justa. Como después de cada gran episodio de violencia hay que hacer un gran esfuerzo para conocer toda la verdad de lo sucedido, juzgar a los criminales, reparar en lo posible el inmenso daño causado y establecer garantías de no repetición. Denunciamos la complicidad de los EE.UU, así como de Europa en la larga historia de colonización , desposesión y sometimiento del pueblo palestino, consentida, financiada y apoyada por quienes se habían erigido en defensores de la Libertad y los Derechos Humanos. El régimen de apartheid no sólo debería avergonzar a quienes lo ejecutan sino también a quienes lo sostienen de mil maneras. Consideramos por ello fundamental que se apliquen sobre Israel medidas de boicot, desinversiones y sanciones, como se aplicaron al régimen sudafricano. Es especialmente necesario el embargo de armas para evitar la tentación de reanudar el genocidio y convertirse en un estado dominante y opresor de los países circundantes, como está sucediendo con Líbano o Siria.

Ante quienes tachan de antisemitismo a toda crítica al gobierno de Israel, denunciamos su oportunismo fariseo, su insensibilidad ante la realidad del genocidio y su falta de escrúpulos ante violaciones sistemáticas de Derechos Humanos. Haber sido víctimas del holocausto no da derecho a practicar otro holocausto ¡Nunca más! No somos antisemitas por denunciar al gobierno de Israel, como no somos antigermanos por denunciar el nazismo ni antiespañoles por denunciar los crímenes del franquismo. Defendemos los Derechos Humanos allí donde son violados y nos sentimos en sintonía con quienes desde dentro y con riesgo para su libertad los defienden. Estamos con esa minoría de judíos que desde Israel se han venido manifestando contra el genocidio y el colonialismo, con las y los jóvenes objetores de conciencia que se han negado a formar parte del ejército, pagando con cárcel e incomprensión su apuesta por la paz. Estamos con las mujeres israelíes y palestinas que se oponen a la violencia que les arrebata a sus seres queridos. Estamos con los soldados arrepentidos que se niegan a seguir cometiendo atrocidades y esperamos que colaboren en el esclarecimiento de la verdad. Estamos con los miles de judíos que en todo el mundo se han manifestado contra los crímenes de Israel y con los millones de personas que en todo el mundo han alzado la voz en defensa del pueblo palestino y contra la barbarie, detenidas en ocasiones, represaliadas o señaladas por sus gobiernos o instituciones. Estamos con Sudáfrica y con todos los gobiernos que han denunciado con firmeza las atrocidades del gobierno de Israel. Nunca fue fácil la lucha por la justicia. Sabemos que no estamos solas y que en estos tiempos, en que la propaganda quiere sustituir a la verdad, es más necesaria que nunca. La lucha sigue. ¡Viva Palestina Libre!