El próximo 7 de febrero dedicaremos nuestro lunes en Sol a protestar por la Ley Mordaza, de 19 a 20 hs. A pocos días para que se debata en el parlamento la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana, más conocida como Ley Mordaza, no son muchas las expectativas de que la nueva Ley nos devuelva la garantía de que vamos a poder ejercer derechos y libertades sin riesgo, pero mientras haya debate, hay esperanza. Todo apunta a que será una Ley Mordaza Maquillada. No podemos menos que hacernos algunas preguntas por si alguien puede responderlas o, al menos, compartir reflexión.

¿Seguiremos siendo delito por ejercer derechos democráticos de expresión, manifestación, información, creación…?

¿Por qué los derechos y libertades que perdemos cuando gobierna la derecha no se acaban recuperando?

¿Por qué la llaman Ley de Seguridad Ciudadana cuando nos crea inseguridad e indefensión?

¿A quién beneficias canjear derechos y libertades por una pretendida seguridad?

¿De verdad está la policía tan amenazada por la protesta pacífica para que la ley garantice de hecho su impunidad con la la presunción de veracidad?

¿Seguiremos ignorando que el sindicato mayoritario de la policía tiene pocas simpatías por la democracia y las libertades?

La Ley Mordaza responde en realidad a la voluntad del Partido Popular de controlar la protesta pacífica nacida a raíz del 15M. No fue la única medida. Las cloacas del Estado han hecho su labor de frenar y criminalizar cualquier posibilidad de cambio profundo. El poder judicial, atrincherado, ha hecho todo lo posible para aparentar culpabilidades donde no las había. Hay que destacar el papel de la prensa que ha ayudado a policía, poder ejecutivo y judicial a criminalizar la solidaridad y, ante la evidencia de la corrupción de unos, hacer ver que todos son iguales. No podemos olvidar quién financia los principales medios de comunicación y de intoxicación. La democracia se está envenenando a sí misma porque se ha convertido en patrimonio de privilegiados que no quieren renunciar a sus privilegios y están dispuestos a todo. Con la Ley Mordaza, y nos tememos que también con la nueva Ley de Seguridad Ciudadana, las acciones que realizábamos yayoflautas en nuestros inicios podrían ser hoy castigadas con severas multas y hasta con cárcel, no por su peligrosidad para la ciudadanía, pues siempre son explícitamente pacíficas y respetuosas, sino por denunciar abusos y privilegios de forma «inadecuada» para las autoriddades. Por todo ello, animamos a todas a manifestarse el domingo día 13 y a difundir el llamamiento a la movilización lanzado por la plataforma No Somos Delito que transcribimos a continuación.

Llamamiento a la movilización del 13F contra la Ley Mordaza

La Ley Mordaza se ha empleado de manera recurrente desde su aprobación en 2015 para desmovilizar a organizaciones, activistas, periodistas y ciudadanía en general que se moviliza en la defensa de los derechos humanos.

Dentro de muy poco se va a reformar la Ley de Seguridad Ciudadana, pero tal y como se ha planteado la reforma, la protesta seguirá amordazada. El acuerdo de gobierno para la reforma de la ley ha llegado con bastantes años de retraso, pero lo que es peor, no eliminará los elementos más lesivos para los derechos humanos, siendo un maquillaje a la Ley Mordaza.

Con la actual propuesta de reforma la Ley de Seguridad Ciudadana seguirá suponiendo una mordaza frente a la protesta pacífica. El derecho a la protesta pacífica y la libertad de expresión seguirían gravemente amenazados al no modificar en profundidad o eliminar los artículos que de manera recurrente han afectado gravemente al ejercicio de estos derechos. 

Desde la aprobación de la Ley en 2015 hasta diciembre 2019, se impusieron cerca de 140.000 sanciones  en base únicamente a dos artículos: resistencia, desobediencia o negativa a identificarse» (36.6) y «faltas de respeto a la autoridad» (37.4), suponiendo el 70% del total de sanciones impuestas en materia de seguridad ciudadana. Ninguno de estos artículos es abordado por el acuerdo de reforma. La propuesta de reforma tampoco plantea eliminar el artículo relativo a la “difusión de imágenes” de actuaciones policiales (36.23). Las actuaciones policiales deben poder ser documentadas tanto por periodistas como por la ciudadanía en general.

La propuesta de reforma no reduce los amplios poderes discrecionales de las fuerzas y cuerpos de seguridad, ni establece adecuados mecanismos de control y rendición de cuentas, dejando la puerta abierta a actuaciones arbitrarias. Tampoco se prohíbe el uso de pelotas de goma. Ni plantea eliminar el artículo 36.11, cuya aplicación supone que las mujeres que ejercen voluntariamente el trabajo sexual y las víctimas de trata se vean obligadas a ejercer la prostitución en lugares aislados, expuestas a mayores peligros de abusos. Ni plantea eliminar la aparente cobertura legal dada por la ley a las conocidas como devoluciones en caliente.

Por supuesto que no nos vamos a quedar calladas y nos vamos a movilizar. Por ello estamos impulsando movilizaciones para el 13 de febrero en todo el Estado español. Poco después se llegará a un acuerdo y vamos a empujar para que el resultado de la reforma sea una nueva ley que garantice el ejercicio de nuestros derechos y libertades. El reto es enorme, pero estamos convencidas de que si nos unimos, ¡podemos lograrlo!

Tenemos muchos motivos para salir a la calle a exigir que no queremos ninguna mordaza que vulnere nuestros derechos y libertades. Hagamos que el 13 de febrero seamos miles en las calles dejando claro que queremos acabar de una vez por todas con las mordazas.

Es el momento, es nuestro momento. Participa e impulsa las movilizaciones.

¡Defendamos nuestros derechos ejerciéndolos!

¡#DESAMORDÁZATE!