Debate ciudadano por el «buen vivir» como afirmación política

Etiquetas posibles: Vida deseable, buen vivir, debate ciudadano, emancipación ciudadana

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Yayoflautas de Madrid, acabamos de constituir un grupo de trabajo denominado “Yayoflautas Debate”. La idea que late tras la constitución de este grupo de debate en nuestra última asamblea es que, desde la reflexión, tenemos cosas que aportar al colectivo de los yayos y al resto de la sociedad. Para nuestra primera reunión, hemos elegido un tema que globaliza la visión parcial de múltiples problemas y una metodología de descubrimiento personal de lo deseable por lo que luchar. Nos parece así que se facilita el debate.

 

Animamos a la ciudadanía a hacer con sus familiares y amigos algo similar para tener pensado cómo sería para nosotros una forma de vida deseable, acorde con nuestras propias necesidades y respetuosa con el planeta, de forma que si la reflexión se extiende y se trabaja por cuanta más gente major, podamos posteriormente consensuar cómo queremos vivir y atrevernos a reivindicarlo realizando una verdadera participación social y política para dirigir nuestras vidas. No hay otras formas, nadie nos sacará de la miseria actual si no somos nosotras mismas capaces de hacer extensivas nuestras propuestas al mayor número posible de gente.

 

El buen vivir como afirmación política: ¿Qué es para ti una buena vida?

 

Corren tiempos de cambio, y sin duda debemos alegrarnos por ello, ¿pero qué se puede y qué no se puede hacer desde la política? ¿Podría un hipotético gobierno lograr una mejor redistribución de la riqueza, crear puestos de trabajo para todos, garantizar unos servicios públicos universales y de calidad?… Pensemos en Grecia y no olvidemos que los Estados cada vez tienen menos posibilidades de implementar políticas diferentes a las propugnadas por Europa aunque solo sea porque necesitan financiación, atraer inversiones, generar confianza en los mercados…

 

Por eso es tan importante el papel de la ciudadanía, la única, si se une en una lucha común, de ir más allá de lo que los políticos solos pueden hacer. Pero para eso tenemos que saber qué queremos, estar plenamente concienciados de ello y ser capaces de hacer extensivas nuestras propuestas al mayor número posible de gente. Sin olvidar que el capitalismo, que es lo que nos ha traído hasta aquí y define nuestra forma de vida, nos constituye, y que para sabotear sus dinámicas hace falta mucha reflexión y mucho debate. Pensemos si no qué quiere la mayoría de la gente o qué sería lo primero que diríamos nosotros si nos preguntaran: empleo, acceso al dinero, acceso al consumo… ¿Pero nos encaminaríamos así a una sociedad más justa, a una vida más armoniosa, a una verdadera emancipación?

 

Pensar en clave de emancipación, cuando la mayoría de la gente seguramente se conformaría con volver a la vida tal y como era antes de 2008, es nadar contra corriente. Sin embargo, ahora como nunca tenemos la oportunidad de repensarlo todo. Y propongo empezar por el principio, por definir qué es para nosotros una forma deseable de vida y, desde nuestros acuerdos, reivindicarla y luchar por ella.

 

A los movimientos indígenas de América del Sur le ha dado una fuerza tremenda asumir el buen vivir como afirmación política. Solo eso ya traza un claro contorno entre a favor de qué y en contra de qué se lucha. También deja al descubierto, claro, las mil maneras en las que puede entenderse la vida buena, maneras que, por ser diferentes, no tienen que ser necesariamente enemigas entre sí.

 

Y lo que proponemos es empezar por la búsqueda de esa definición. Pasaría por dos cuestiones. La primera, darnos cuenta de cuántas cosas hay o ha habido en nuestra forma de vida que nos han venido impuestas y no hemos tenido más remedio que aceptar si queríamos sobrevivir. La segunda, atrevernos a revindicar para todos otra forma de vida más acorde con nuestras verdaderas necesidades y con la preservación planeta.

 

Pensemos y aportemos ideas sobre las dos cuestiones que acabo de plantear. Las precisamos:

 

1. Desde nuestra propia experiencia, pensar cuántas cosas hay o ha habido en nuestra forma de vida que nos han venido impuestas y no hemos tenido más remedio que aceptar, aunque no nos hayan procurado felicidad o nos hayan impedido el disfrute de lo que más deseábamos. Hacer un listado y enviarlo al grupo.

 

2. Aportar ideas sobre cómo sería para nosotros una forma de vida deseable, acorde con nuestras propias necesidades y respetuosa con el planeta.

 

Serviría cualquier aportación: desde una frase suelta a una reflexión elaborada, una cita, un poema, un texto, una propuesta extraída del programa de un partido político, un grupo ecologista, feminista… que nos sea afín. Cualquier cosa.

 

Finalmente se recogerán todas las ideas que se vayan enviando por correo y se elaborará un primer documento, resúmen de conclusions del debate yayoflauta.

 

 

 

Textos y audios en la línea de lo que se propone trabajar:

 

http://www.eldiario.es/zonacritica/Rosa-Parks-sonado-sentarse-delantera_6_475312504.html, artículo de Teresa Rodríguez.

 

“Entrevista a la directora general de FUHEM y coordinadora durante nueve años de Ecologistas en Acción, Yayo Herrero López” (publicada en eldiario.es y en la web www.decrecimiento.info). Trata de El ecofeminismo y el decrecimiento como premisas de un nuevo modelo económico y social. htmlhttp://esencialomenos.blogspot.com.es/2016/01/desde-los-comunes-hacia-lo-publico.html?m=1

 

 

Llamamiento